MARIDAJE DE CONTRASTE
Doña Elba Connecticut + Jerez Cream de Bodegas Osborne
Como Cigar Sommelier, muchas veces y de manera inconsciente mientras disfruto de un cigarro, termino buscando la forma de mejorar la experiencia pensando con que bebida y alimento combinaría mejor ese tabaco.
La propuesta de hoy es realizar un atrevido pero interesante maridaje de contraste, combinando un Robusto Doña Elba nicaragüense con un Jerez cream de bodegas Osborne.
Al igual que con los vinos y otros productos gourmet, los cigarros utilizan las dos estrategias básicas de maridaje:
Complemento, donde buscaremos bebidas que compartan algunas de las notas de sabor del tabaco, por ejemplo, el terroso de un puro nicaragüense combinaría bien con los aromas a tierra de un single malt envejecido en barricas de roble americano.
Contraste, donde fusionamos los opuestos creando una sensación refrescante y “nueva” en el paladar. Por ejemplo el picante de un cigarro dominicano combinado con la dulzura de un chocolate negro.

Tabaco | Doña Elba Conneticut
Como en todo maridaje, el centro del mismo debe ser el cigarro, y el elegido para esta experiencia es un tabaco nicaragüense elaborado en la ciudad de Granada por Doña Elba Cigars, una pequeña fabrica artesanal pero muy eficiente, que utiliza tabaco cultivado en diferentes zonas de Nicaragua, así como hoja de capa procedente del valle de Jalapa. Precisamente esta última es la que envuelve nuestro robusto, una preciosa capa de semilla Connecticut shade.
El Connecticut Shade es más claro en color, fuerza y con sabor más neutro, en realidad es una variedad procedente de Sumatra y que llego al Valle del rio Connecticut en la década de 1890. Pero esa misma variedad cultivada en la región de Jalapa, al norte de Nicaragua y en condiciones de sombra natural, le otorgan un punto más de amargor y menos dulzura que la hoja ancha originaria de Connecticut.
En cigarros con cepos medios o finos, la hoja de capa influye ciertamente en el sabor y aroma percibido por nuestros sentidos, aquí es donde entra en juego mi propuesta de combinar este cigarro con un excelente vino de Jerez, El Santa María Cream de bodegas Osborne. Su bouquet consistente típico de la uva Palomino Fino, propio de los vinos de Jerez, ofrece notas de pasas de Pedro Ximénez conjugado con los aromas de roble. Un trago suave y con un final larguísimo, un contraste ideal para hacer disfrutar nuestro paladar después de un almuerzo ligero o un buen aperitivo de media mañana.

Hasta la próxima, salud y buenos humos
Miguel Ángel Arvelo Ramos | Cigar Sommelier